miércoles, 11 de mayo de 2011

Escritores de la libertad

Dirección: Richard LaGravenese.
País: Estados Unidos / Alemania
Año: 2007.
Duración: 123 min.
Género: Drama.
Interpretación: Hilary Swank (Erin Gruwell), Patrick Dempsey (Scott Casey), Scott Glenn (Steve Gruwell), Imelda Staunton (Margaret Campbell), April Lee Hernandez (Eva), Mario (Andre), Kristin Herrera (Gloria), Jacklyn Ngan (Sindy), Sergio Montalvo (Alejandro), Jason Finn (Marcus), Hunter Parrish (Ben).
Guión: Richard LaGravenese; basado en el libro "The freedom writers diary" de Freedom Writers y Erin Gruwell.
Producción: Stacey Sher, Michael Shamberg y Danny DeVito.

Argumento:

Escritores de la libertad está basada en una historia real que transcurre en Long Beach, en el Rodney King, el High School Wilson. El instituto se encuentra en una zona mayoritariamente próspera, pero los alumnos asignados al aula 203 son los clasificados como casos perdidos, imposibles de enseñar; un grupo de ‘intocables’ que deben superar todo tipo de circunstancias: pobreza, mala educación, historial criminal, drogadicción, padres en la cárcel, y dependencia de pandilleros.
Erin Gruwell es una profesora llena de ideales que escoge enseñar en Wilson para hacer un aporte a la sociedad y, en lugar de hallar un programa educativo basado en la igualdad de oportunidades, encuentra un clima de tensión racial, intolerancia, desesperanza y cultura de pandilleros en la que los chicos practican una conducta social de auto-segregación como forma de supervivencia.

Guía de análisis

1)   En una de las primeras escenas de la película, Erin tiene una entrevista con la directora del colegio en el que luego va a empezar a trabajar. En la misma cuenta que en su adolescencia había pensado estudiar derecho pero que finalmente se había decidido por la educación. Durante el transcurso de esa secuencia la protagonista dice la siguiente frase: “…si estas defendiendo a un chico, ya perdiste la batalla…”. ¿Qué creés que quiso expresar con este comentario?
2)   En esta misma secuencia la directora le explica a la protagonista que el proyecto de integración escolar fracasa debido a que los alumnos, tarde o temprano, dejaban de ir al colegio. En el mismo sentido el padre de Erin le dice, en una secuencia posterior, que iba a desperdiciar su talento en gente que no apreciaba la educación. a) Según tu punto de vista y desde lo que se puede ver en la película, ¿cuáles son los motivos del fracaso de este tipo de modelos educativos? Teniendo en cuenta el modo en que se van desarrollando los acontecimientos, ¿qué reflexión te merece el comentario hecho por el padre?
3)   ¿Qué creés que quiso mostrarnos el director de la película en la escena en la que los estudiantes debían acercarse a una línea en el caso de haber pasado o no por determinadas experiencias de vida?, ¿en qué otras escenas el director remarca este concepto?
4)   Durante el transcurso de una de los momentos centrales de la película, uno de los alumnos pregunta: “… ¿qué es un holocausto…?. ¿De qué manera el descubrimiento hecho por los alumnos de este hecho histórico, les permite entender mejor sus propias realidades y empezar a superar las diferencias existentes entre ellos?
5)   Hacia el final de la película la profesora reune a sus alumnos y los invita a hacer un brindis por el cambio. Uno de los chicos narra una historia desgarradora en la que cuenta que durante el verano había sido desalojado de su casa junto con su familia, “…por qué querría ir a la escuela si no tengo un hogar…”, pensó. Finalmente se dio cuenta que debía volver por que allí lo esperaban su amigos, su maestra y una oportunidad para cambiar, dándose cuenta, de ese modo, que allí tenía un hogar. A partir de esta escena, reflexioná sobre el contenido de la película y el mensaje que ella nos deja.

Material de análisis

Acá les dejo algunas cosas para que sigan pensando un poco más en los temas que toca esta película tan interesante.
En el siguiente link van a encontrar una nota radial imperdible realizada a Cesar Gonzalez en el programa perros de la calle. El protagonista de la entrevista estuvo preso en distintos penales por haber participado en un secuestro extorsivo. Estando privado de su libertad, Cesar descubrió la literatura y a partir de la educación hizo un cambio tan profundo en su vida que lo llevó a terminar el secundario, a ingresar a la universidad y a pensar su pasado, su presente y su futuro de un modo diferente. Cuando escuchen el audio van a encontrar muchos puntos de contacto con el argumento de la película. Háganse un tiempito que realmente vale la pena.

http://perros.metro951.com/2010/01/25/el-poeta-villero/

Les dejo también la página de la fundación que llevan adelante los escritores de la libertad para que conozcan la historia más allá de la ficción.

http://translate.google.com/translate?hl=es&sl=en&tl=es&u=http%3A%2F%2Fwww.freedomwritersfoundation.org%2F

lunes, 9 de mayo de 2011

La vida es bella

Dirección: Roberto Benigni
Protagonistas: Roberto Benigni, Nicoletta Braschi, Giustino Durano, Sergio Bini, Marisa Paredes, Horst Buchholz, Lidia Alfonsi.
Guión: Roberto Benigni
Dirección de fotografía: Tonino Delli Colli
Nacionalidad: Italia
Año: 1997
Duración: 115 minutos
Premio especial del jurado Festival de Cannes
Candidata a 7 Oscar en 1998.

Argumento:

Italia, 1939. Guido Orefice, un joven judío que trabaja en el hotel de su tío mientras sueña con poseer una librería, y su amigo, el poeta Ferrucio, viajan por la Toscana. Guido se enamora fulminante, loca y apasionadamente de Dora, una profesora local, a la que bautiza como Princesa. “La vida es bella”, de esta manera, arranca como una idílica comedia ubicada en la Italia de Mussolini. Guido, pese a la religión católica que profesa la gentil Dora y al hecho de que ella está prometida a un aburrido oficial fascista, Rodolfo, con el que el soñador mantiene un par de desafortunados encontronazos, la corteja con éxito. Pero la feliz historia sufre un inesperado giro. Y nada prepara al espectador para el shock que le espera en la segunda parte de la película, cuando la familia que Guido, Dora y su pequeño Giosué han formado es detenida y enviada a un campo de concentración. Una vez allí, pese al horror y la desesperación, Guido idea con determinación un plan: defender a su pequeño hijo de la barbarie, crueldad y brutalidad imperantes en el campo de exterminio fascista. Así, Guido persuade al confiado pequeño de que todo es, en realidad, un enorme y formidable, aunque extraño, juego en el que ambos deben participar para competir por el máximo premio: un tanque real, reproducción del de juguete que Giosué atesora como su posesión más preciada. La fantasía y energía aparentemente inextinguible del padre convencen al niño de estar inmerso en el juego más grande y excitante jamás soñado. La meta final de Guido es lograr mantener intactos los sueños del niño, hacerle creer que la vida es bella y que vale la pena vivirla con alegría. Por todo eso, “La vida es bella” comparece como una comedia y también como una tragedia. Y, escribiéndola, dirigiéndola e interpretándola, Benigni ha conseguido lo casi imposible: crear una comedia a partir del Holocausto judío y erigir un manifiesto de afirmación de la sociedad y la vida en un lugar y momento históricos que simbolizan la muerte de todas las relaciones sociales.

Material de análisis

“El miedo a la libertad” de Erich Fromm:

Este libro intenta explicar los aspectos de la crisis contemporánea de la civilización occidental relacionados con la libertad del hombre. Una crisis que ostenta diversas manifestaciones, de las que Fromm destaca dos para sus fines analíticos: su expresión política (el fascismo) y su expresión sociocultural (la creciente estandarización de los individuos en las sociedades avanzadas). Ambas manifestaciones de la crisis no son más que formas colectivas de evadir la libertad. El análisis de Fromm va dirigido precisamente a esclarecer esta paradoja a través de un examen del significado de la libertad para el hombre moderno y de sus intentos de rehuirla.

 “Si esto es un hombre” de Primo Levi:
Uno creía haber visto y leído suficientes testimonios del holocausto judío y de la barbarie nazi durante la Segunda Guerra Mundial; sin embargo, “Si esto es un hombre” ha resultado ser algo inesperado, insólito en mitad de tanta amargura, de tanto odio y de tanta sangre.
El libro de Primo Levi no ahonda en la masacre; no escarba en las tumbas de los asesinados; no se recrea en los sufrimientos de los presos de los campos de exterminio. El italiano prefiere (y el título ya debería haber dado pistas de ello) tratar de profundizar en el hecho, quizá, más inhumano de todo el proceso: cómo un hombre puede arrebatar a otro todo indicio de humanidad, toda muestra de civilización. Uno no se esperaba algo así y, aunque no sería justo afirmar que otros testimonios son menos veraces o estremecedores, semejante verdad ha resultado ser dolorosa y causante de reflexión.
Levi narra su internamiento en Monowitz, un campo de trabajo dependiente del de Auschwitz, a comienzos de 1944. Pronto comprende que aquello no es sino una ruleta rusa, una suerte de juego cruel en el que puede morir cualquiera, un microcosmos de miseria, de horror, de injusticia y de maldad. Las descripciones de los trabajos que son obligados a llevar a cabo los presos, de los castigos a los que se los somete, de las condiciones de vida que mantienen, son tan espeluznantes que sorprende verlas narradas de una manera tan expositiva, casi tan desapasionada. Levi, como hemos dicho, no se recrea en los detalles sórdidos o macabros, sino que describe con pulcritud ese proceso que, poco a poco, aunque con extraordinaria rapidez y eficacia, priva a los seres humanos de su condición de hombres para convertirles en esclavos.
Obviamente, en una novela de este calibre el estilo no es determinante, pero el escritor da en el clavo al narrar acontecimientos de forma objetiva (si así se la puede denominar). Los métodos que los alemanes utilizaban para alienar a sus cautivos eran refinados, cuidadosos y, por ello, absolutamente terroríficos. El mundo que se creaba dentro (y en torno a) los campos de concentración era una muestra palpable, y así lo quiere reflejar Levi, de la degradación que puede alcanzar el hombre. Sin embargo, también se dan indicios de la importancia que algunos concedieron a preservar su humanidad de tal hecatombe moral, y constituyen algunos de los momentos más preciosos y emocionantes del libro.
Como añadido, se incluye al final del libro un apéndice en el que el propio autor contesta a una serie de preguntas que, a lo largo de las presentaciones que hizo, le formularon algunos interlocutores, y que, lejos de ser superfluas, presentan algunas reflexiones verdaderamente interesantes. En suma, un libro duro, terrible, pero quizá por ello necesario.